El comedor es un ambiente básico en la estructura del desarrollo familiar, dado que aquí se da uno de los momentos más importantes del día en el hogar. Los colores del comedor pueden ayudar a que ese momento sea aún más especial y disfrutable.
A través de la historia y en muchas culturas, el momento de la comida es uno de los más consagrados del día, pues tiene reunidos usualmente a toda la familia y es un bello instante que se debe compartir en armonía y con el mayor espíritu de alegría.
Por ello, los profesionales en decoración saben que a estos recintos se le debe dar una especial atención cuando se trata de ambientarlos, decorarlos y pintarlos. Hay quienes aconsejan que el comedor tenga toques de colores vibrantes. Pero también hay quienes prefieren algunos tonos que sean menos brillantes e intensos como el beige, crema, verde o celeste, o también colores pastel como el rosado, melocotón y lavanda. Veremos a continuación una serie de tonalidades que están de moda y cómo combinarlas.
Blanco con toques de color
Podemos escoger un color como base de la ambientación. En este caso, la propuesta se inclina hacia la decoración en blanco para proporcionar un estilo sobrio y con mucha luz, para un lugar en el que se pueden compartir desde los momentos más íntimos hasta una recepción para varios invitados. En este caso, un mantel azul intenso y unas flores en tonos de rojo, dan vida a este hermoso espacio donde predominan el blanco y otros tonos neutros.
Cuando pensamos en el rojo, no lo asociamos siempre con la decoración, por lo general lo pensamos en un vestido o un labial. Será porque el rojo es un color tan vibrante e intenso que no lo asociamos con los espacio de la casa como el comedor. Cierto es que el rojo combinado con el blanco y usado como por ejemplo, en las sillas, es una buena opción para decorar.
Blanco con neutros
Es cierto que la gama de los tonos grises, cremas, marrones y tostados resulta muy elegante y te ayuda a ganar amplitud si complementan a un fondo blanco. Así que si eres fiel seguidora de este clásico y te cuesta cambiar, puedes introducir estos colores en el comedor, ya que es una ecuación que nunca va a fallar.
Puedes utilizar diferentes tonos de blanco en la composición, por ejemplo, el blanco de las paredes puede ser en una tonalidad ligeramente más oscura que la de los cuadros o las sillas, como vemos en la imagen inferior. Una manera de embellecer al color blanco es colocando algunos cuadros en tonos azules con fondo banco y el marco plateado para demarcar el espacio. Una lámpara colgante en plateado realza la blancura de su entorno.
El color blanco realza los toques de modernidad, aunque sin perder su elegancia y calidez.
Amarillo
Hay bonitas maneras de combinar el amarillo y atenuarlo. Por ejemplo, combinándolo con tonos marfil o pasteles. También podemos utilizar rosas pálidos, si no nos atrevemos a ser demasiado radicales.
También lo atenuaremos combinándolo con algunos colores un poco más masculinos, como un azul oscuro, el marrón o el negro.
Azul
El azul en todas sus gamas es una de los tonalidades que mejor encaja en los ambientes en donde predominan el color beige y marrón. Si quieres algo diferente a esta clásica combinación, puedes utilizar varios tonos de azul para simular un paisaje montañoso, como vemos en la imagen inferior.
El azul es uno de los colores que se está incorporando con fuerza a las tendencias de decoración actuales, sobre todo combinado con la gama de marrones claros.
La tonalidad que evoca la pacífica calma marina, los sueños y el frescor se puede hacer presente en todos los espacios de la casa. El azul y sus tonalidades nos recuerda lo maravilloso que es salir a caminar en una mañana de cielo despejado o lo cristalino de las aguas del mar y por qué no la profundidad de una noche azul y estrellada.
Toma en cuenta esta tendencia la próxima vez que cambies el color de una habitación, no te arrepentirás
Rosa
La mayoría de las personas tienen una fuerte reacción al color rosa, ya sea de amor o de odio. Por esta razón, es una decisión muy valiente elegir este color en la decoración.
El color rosa por lo general se considera apropiado para dormitorios de niñas o adolescentes, y raramente se nos ocurre decorar otro espacio de la casa en este color. Se asocia a lo femenino y delicado, pero los hombres no tiene por qué sentirse mal en un espacio así. Depende de nuestro ingenio para lograr una decoración apta para energías tanto femeninas como masculinas. El rosa palo como vemos arriba, o un rosa pastel muy pálido como vemos abajo, son colores perfectos para que todos se sientan a gusto.
Es un color que se percibe como romántico, optimista y festivo, y éstos son excelentes estados de ánimo que podemos invocar en cualquier comida a través de la decoración.
Verde oliva
Como puedes apreciar en la siguiente imagen, con una pared verde oliva se cambió el aspecto aburrido y tradicional de un salón donde solo existían colores blanco, beige y tostados.
El verde oliva es perfecto para resaltar colores luminosos como el amarillo.
Verdes luminosos
El color verde pastel luminoso en las paredes principales, también es perfecto, junto con el blanco, para lograr que las habitaciones pequeñas parezcan más amplias. También constituye un marco perfecto para resaltar el mobiliario y los complementos.
También puedes atreverte a combinar sutilmente colores opuestos, como una franja en la pared de verde agua, que contrasta con sillas en colores rosa. A su vez las sillas contrastan con el blanco de la mesa. Las maderas en tonos claros complementan a la perfección este espacio moderno con aires nórdicos.
Gris claro
Un gris claro te puede ayudar a lograr un espacio rústico y elegante a la vez. Para el mobiliario se pueden utilizar materiales como la madera y el metal, además de diferentes tonos de blanco. Los metales en color negro ayudan a equilibrar la claridad de excesiva.
En un ambiente con paredes gris claro, no está nada mal utilizar una alfombra colorida. Los muebles en madera natural clara se ven súper elegantes en esta combinación de colores.
El color gris en las paredes también es una buena opción, ya que brinda elegancia y neutralidad al hogar. No altera los ánimos, no cuenta con pretensiones, es sin más, un tono elegante que puede utilizarse para decorar el hogar.
Los tonos suaves se acercan al blanco, por lo que son ideales para ofrecer más amplitud e iluminación al ambiente. Son ideales para decoraciones minimalistas o vanguardistas. Son una opción ideal para los amantes de lo sencillo y moderno.
Gris medio
Otro esquema de color que nunca falla, es elegir dos tonos de gris y dos tonos de beige. Es un clásico que nunca pasa de moda.
El color gris da ambientes apacibles, tranquilos. También es un color que puede quedar bien con otros, tan sólo hay que tener algo de gusto en la decoración y utilizar los complementos adecuados. Uno de los colores que mejor queda con el gris es el blanco.
Gris oscuro
Como ya habrás visto hay que tener en cuenta que hay toda una variedad de tonalidades del gris, y puedes elegir la intensidad que prefieras. El gris oscuro en las paredes, da mucha elegancia y sobriedad al ambiente. Pero para que no se vea oscuro, los muebles y decoraciones deben ser de tonos claros y luminosos. Este contraste, además de verse fabuloso, ayuda a resaltar las formas del mobiliario.
Introduciendo un pequeño mueble auxiliar, como este aparador de líneas rectas, y un juego de comedor en colores claros, se ha logrado renovar con éxito la decoración de este hermoso espacio.
Los tonos oscuros pueden dar más elegancia y distinción al hogar, aunque hacen ambientes más pequeños y acogedores, ideales sobre todo para espacios grandes y con buena iluminación.
